3. Él es Quien creó siete cielos superpuestos. No verás en la creación del Clementeninguna imperfección. Vuelve tu vista al cielo, ¿acaso ves algún fallo?
5. Y, ciertamente, hemos adornado el cielo de este mundo con (estrellas que brillan cual) lámparas, y hacemos de ellas proyectiles contra los demonios (que pretenden escuchar lo que se dice en el cielo). Y hemos preparado para ellos el castigo de un fuego abrasador.
8. Estará a punto de estallar de ira. Cada vez que un grupo sea arrojado a él, los ángeles guardianes del infierno les preguntarán: «¿Acaso no recibisteis a ningún amonestador (que os advirtiera del castigo de Al-lah)?».
9. Contestarán: «Sí, ciertamente llegó a nosotros un mensajero de Al-lah advirtiéndonos de ello, mas lo desmentimos y dijimos: “Al-lah no ha revelado nada y vosotros (amonestadores) estáis en un gran extravío”».
17. ¿Acaso os sentís a salvo de que Quien está en el cielo no envíe contra vosotros unfuerte vendaval cargado de guijarros? Entonces conoceréis(la severidad de Mi castigo) que os advertía.
19. ¿Acaso no observan cómo las aves que vuelan sobre ellosextienden y recogen las alas? El Clemente es Quien las sostiene (en el aire). En verdad, Él ve todas las cosas.
20. ¿Quién, a parte del Clemente, podría actuar como un ejército auxiliándoos y protegiéndoos (del castigo)? Mas quienes rechazan la verdad viven sumidos en el engaño.
22. ¿Quién está mejor guiado: el que camina cabizbajo[1062] (y no ve lo que hay delante de él) o el que camina erguido por el camino recto?
[1062] El que camina cabizbajo simboliza a quien rechaza la verdad porque no ve el camino y se desvía de él, mientras que el que camina erguido representa al creyente que puede ver con claridad el buen camino y seguirlo.
27. Y cuando vean próximo el castigo (tras el comienzo del Juicio Final), los rostros de quienes rechazaron la verdad se consternarán. Y (los ángeles) les dirán (recriminándolos): «Esto es lo que pedíais con apremio».
28. Diles (a quienes niegan la verdad, ¡oh, Muhammad!): «Si Al-lah me destruyese a mí y a quienes me siguen (como deseáis) o se apiadase de nosotros, ¿acaso eso os libraría de un castigo doloroso?».